CRÓNICA: Real Sociedad 1-0 Villareal. La magia se impone en Anoeta.

Llegaba la jornada 8 a Anoeta, después del triunfo europeo de los Txuri Urdines en Chişinău, ante el FC Sheriff. La Real, buscaría su quinta victoria en liga, ante todo un Villarreal. Los de Unai Emery, venían de vencer por 5-0 al Austria Wien en casa con un recital de Morales.

Locales y visitantes, llegaban al encuentro con ganas de ganar, los de Imanol para continuar con la racha de victorias, y en contrapuesta, el Villarreal buscaba rehacerse de los últimos 3 partidos en liga, donde solo sumó 2 puntos de 9.

 

El cuadro donostiarra saltó al terreno de juego con un 11 sin sorpresas: Con Remiro bajo palos, Aihen y Sola en los laterales, línea de dos centrales para el capitán, Aritz Elustondo, y un Jon Pacheco que disfruta de su cuarta titularidad en la presente campaña. En el centro del campo, los encargados de la magia Txuri Urdin, Martin Zubimendi en el pivote defensivo, Merino y Brais como interiores, y en la media punta, David Silva. Y para el ataque, Take Kubo y Sørloth en una doble punta.

El submarino amarillo saldría con: Gerónimo Rulli en portería, Alfonso Pedraza en banda izquierda y Kiko Femenía por la derecha. En el centro de la defensa, dos centrales de garantías absolutas: Pau Torres y Raúl Albiol. En el centro del campo groguet formarían Capoue y Parejo, para acompañarles en las bandas, Coquelin por la zurda y Yeremy Pino por la diestra. Y finalmente, los encargados del gol, Danjuma y Lo Celso.

 

El partido no iniciaría sin antes tener el minuto de silencio por el fallecimiento de Txomin Landa y Unai Arruabarrena.

ImatgeImatge

Pitó César Soto Grado el inicio y la Real impuso su ley, en los primeros minutos, vimos algo común en los donostiarras, una presión alta tras perdida y las ganas de poseer el esférico en todo momento. El Villarreal, en cambio, parecía estar cómodo sin balón, adelantó líneas y las replegó, aunque no presentaba ninguna presión, y por ende, dejaba el control del esférico a una Real, que sabía qué partido querían jugar.

A medida que pasaban los minutos, el dominio realista se fue extendiendo, a la vez que el conjunto de Emery iba metiéndose cada vez más atrás. Con largas posesiones y grandes combinaciones de los Brais, Silva, Merino y Zubimendi, el Villarreal acabó defendiendo buena parte del primer tiempo en su área, esperando así salir a la contra para sorprender a la Real.

Pero ese plan no funcionó, y no lo hizo por dos buenas razones: Aritz Elustondo y Jon Pacheco. Los centrales Txuri Urdines se mostraron férreos e insuperables durante todo el partido. Cabe destacar el gran papel de Pacheco, que ha pasado en muy poco tiempo de ser el central del Sanse a titular en el primer equipo en muy poco tiempo.

Por las bandas, Sola y Aihen daban un recital, tanto de ataque como en defensa. Lo vimos sobre todo con el de Etxauri, que neutralizó totalmente a Yeremy Pino y estuvo jugando como si fuese un extremo más, regateando y poniendo centros como Pedro por su casa.

Imatge

El gol no podía tardar, y vino de la mano de dos zurdos pletóricos de calidad. Mikel Merino puso un centro con música para dejar solo a un Brais Méndez, que con toda la tranquilidad y picardía necesaria, definió a las mil maravillas para batir a Rulli.

 ImatgeImatge

Con el dominio aplastante de la Real en todos los aspectos del juego llegó el descanso. Las cosas cambiarían para un Villarreal que cambió a Danjuma por Nicolas Jackson y a Yeremi Pino por Morales.

 

El segundo tiempo fue más disputado, por momentos parecía que la Real volvía a tomar el control, pero el conjunto groguet no se quedó mirando, fue más atrevido y ejerció una muy buena presión a una Real Sociedad que hacía lo propio.

Avanzaban los minutos y parecía que el gol estaba al caer, la pregunta era que colores lo celebrarían, y es que el partido estaba brillante. Los de Imanol, que vieron como el juego se volvía loco, intentaron ponerle pausa bajando la presión y replegándose un poco.

Imatge

Aunque el Villarreal no le bajaría el ritmo a su juego, y en los últimos 15 minutos apretó como nunca a una Real que se encerró a achicar balones como podían. Y aunque intentaron salir y tener el balón, se notó la fatiga y tuvieran que defender agónicamente hasta el 93.

El submarino amarillo no se quiso dar por vencido, y seguiría atacando hasta el mismo final del partido, pero no fue suficiente para ganar al buen hacer de los realistas en todo el partido.

La Real gana así su quinto partido en liga y suma 16 puntos en 8 jornadas. Los de Imanol han demostrado la calidad que tienen y el buen estado de forma del todo el equipo. Brais Méndez, sigue con su racha goleadora y de buen juego, que hoy, ha dado 3 puntos a la Real en un encuentro vital contra un rival directo.

El Villarreal, por su banda, no ha tenido suficiente con la segunda parte, lo ha dicho Rulli en rueda de prensa, no se pueden desperdiciar 45 minutos de un partido de fútbol, porqué lo acabas pagando caro.

 Imatge

Los tres puntos se quedaron en Anoeta en un partido en el que la magia Txuri Urdin, se impuso al Villarreal.

 

 

Redactor: Bosco Vilaplana

Comentarios

Publicar un comentario